Disfagias y telemedicina
Como ya sabemos, la disfagia es un síntoma definido como “la dificultad para la deglución”, lo cual implica la progresión dificultosa del bolo alimenticio desde la orofaringe hasta el estómago.
Aunque la relación entre telemedicina, telerehabilitacion y disfagia no parezca tan evidente a priori, existen diversos estudios y revisiones sobre el empleo de fisioterapia digital en pacientes con desórdenes de la deglución. Sin ir más lejos, ya en plena pandemia, Reverberi et al, publicaron una revisión de 16 artículos que comparaban una práctica clínica digital con una presencial en personas con este tipo de sintomatología.
De hecho, la American Speech-Language-Hearing Association (ASHA) considera la telemedicina una modelo apropiado de prestación de servicios para aquellos desórdenes relacionados con la deglución y el lenguaje.
En este marco y sabedores de la relación existente entre el envejecimiento y la aparición paulatina de este tipo de desórdenes, las entidades Beaz e IMQ Igurco lanzaron un reto de innovación abierta lanzado en el marco del programa BIOK! con motivo de la creación del Nagusi Intelligence Center para hallar una solución a este problema tan presente en el colectivo de las personas mayores.
De ahí que este reto BIOK! se enmarque en la creación del Nagusi Intelligence Center, proyecto estratégico de Bizkaia que trata de transformar el reto del envejecimiento en una oportunidad para el desarrollo económico y social.
En TRAK, siempre hemos trabajado para mejorar la asistencia digital y llevar nuestra solución de fisioterapia digital a cualquier ámbito clínico en el que paciente pueda beneficiarse del ejercicio terapéutico. Por eso, quisimos colaborar formar parte del reto y crear nuestra propuesta.
Telerehabilitacion y disfagia, el reto de Beaz e IMQ
Desde que se lanzara el reto, nuestro equipo ha trabajado en la mejora de la IA y en el análisis de los movimientos faciales para crear una solución adecuada para este tipo de casos. «Nuestra plataforma busca ser útil al profesional sanitario y beneficiosa para el paciente. Por eso la hemos adaptado a este tipo de casos, para ofrecer el mejor servicio a estos pacientes», afirma Carlos Rodríguez Sierra, COO de TRAK.
Al final, nuestra propuesta para reducir los riesgos derivados de la disfagia convenció al jurado tanto por su enfoque como por la innovación tecnológica que conlleva, permitiéndonos colaborar con IMQ para sacar el proyecto adelante.
La solución de nuestra startup, experta en rehabilitacion digital y seguimiento de pacientes mediante inteligencia artificial (IA), consiste en una aplicación de fisioterapia digital para prescribir tratamientos de ejercicio terapéutico a los pacientes con disfagia y realizar un seguimiento de su tratamiento a distancia.
Con nuestro algoritmo de inteligencia artificial y utilizando solo la cámara de un dispositivo móvil o un portátil, TRAK es capaz de detectar los movimientos de la cara del paciente en cada ejercicio para ofrecerle correcciones en tiempo real. El profesional sanitario puede, además, crear protocolos de ejercicio personalizados en menos de un minuto y monitorizar la evolución del paciente con métricas de los ejercicios.
Además de la oportunidad de “ser pioneros en aplicar la IA para mejorar la calidad de vida de las personas mayores”, el hecho de que la solución permita personalizar las pautas de rehabilitación ha sido determinante para la elección de Trak ya que, como explica IMQ Igurco, “el futuro de los servicios sociosanitarios es la atención centrada en la persona y esta propuesta es un paso más para conseguir ese enfoque”.
En la próximas semanas y gracias a este logro, nuestra empresa comenzará el desarrollo de un proyecto piloto junto a IMQ Igurco que permitirá ver los resultados de nuestra solución. Sean cuales sean, Jon Vital, director ejecutivo de Trak, manifiesta estar «entusiasmado» con el proyecto: «el simple hecho de trabajar con instituciones de renombre como IMQ Igurco y Beaz ya supone un gran orgullo para nosotros. ¡Esto es el progreso! Cuando instituciones de diversa índole, del ámbito público y del privado, ponen sus recursos al servicio de los pacientes y de la evolución de un aspecto tan importante para la sociedad como la sanidad».